"Amigo:
Estoy de lo peor y necesito que ahora mismo y sin chistar, me de Vd. el reloj y el dinero que lleve, si no quiere ir a la casa de socorro o al cementerio, pues estoy decidido a darle una puñalada si no me entrega Vd. lo que le pido, y tenga en cuenta que si da una voz o escandaliza, yo podré caer preso, pero a Vd. no le llegan a tiempo ni la estopa del santo óleo"
(Siempre seré fan de los playmobil, jejejejejejejeje)
Y pensaréis que con este texto se me ha ido la pinza, ¿no? Bueno, puede ser que las fiestas me hayan dejado algo trastocada, no se, jejejjejejejeeje.
Os dejo este fragmento de una lectura que tengo entre manos que ya os contaré (se me está haciendo algo pesada, la verdad), y me resultó curioso esta forma de atracar a la gente. Es conocido como atraco a la pápira, y era muy típico de finales del siglo XIX. El atraco consistía en que el atracador le daba una nota a la víctima con la excusa de que se la leyera, dado que el atracador hacía creer que no sabía leer. En la nota ponía algún texto parecido como el de arriba...
No se, que es una tontuna, pero que me ha parecido curiosa esta forma de atracar,
¿a vosotros no?
Pd. Intento ponerme al día con blogs, mails, comentarios, etc, etc, pero tengo mucho trabajo acumulado en casa después de estar una semana sin parar (ropa, cocina, recoger, limpiar, plancha, lavadoras, etc, etc). Dadme un poquito de tiempo para volver a la normalidad y ponerme al día, por fas!!!!!!